El uso de suelos de madera en exteriores es una opción popular en la construcción y diseño de jardines y terrazas. Aunque la madera es un material tradicionalmente utilizado en interiores, existen varias opciones de madera tratadas específicamente para su uso en exteriores. A continuación, se describen los aspectos técnicos a tener en cuenta al utilizar suelos de madera en exteriores.

  1. Tratamiento de la madera: Es esencial utilizar madera tratada para su uso en exteriores, ya que esto ayudará a proteger la madera de la humedad y los agentes atmosféricos. La madera tratada debe estar clasificada como resistente a la humedad acorde a la exposición que vaya a tener, y debe ser tratada si fuera necesario para su durabilidad.
  2. Especies de madera: Se deben utilizar especies de madera naturales resistentes a la humedad y a las condiciones climáticas adversas, como la madera de teca, el ipe, el cumarú o el garapa. Si se eligen otras especies de madera han de llevar un tratamiento que las adapte a las condiciones en las que van a estar instaladas.
  3. Instalación: La instalación de suelos de madera en exteriores debe realizarse por profesionales con experiencia en la instalación de suelos de madera. Es importante asegurar que los tablones estén correctamente fijados y sellados para evitar problemas de humedad y movimiento. Así como las consideraciones para la aireación necesaria.
  4. Mantenimiento: Es importante realizar un mantenimiento regular para garantizar la durabilidad de los suelos de madera en exteriores. Esto incluye limpieza regular, sellado periódico y protección contra rayos UV.
  5. Ambientes de clima severo: en lugares con climas extremos, como las zonas costeras o las montañas, es importante elegir una especie de madera con alta resistencia a la humedad y a la intemperie.

 

En conclusión, el uso de suelos de madera en exteriores es una opción atractiva y práctica que puede mejorar significativamente la estética y la funcionalidad de un espacio al aire libre. Sin embargo, es importante tener en cuenta los aspectos técnicos, como el tratamiento de la madera, la elección de especies resistentes, la instalación y el mantenimiento adecuados, y la consideración del clima, para garantizar la durabilidad y la seguridad de los suelos de madera en exteriores. Igualmente, la madera que vemos en la playa expuesta a condiciones extrema nos ha demostrado su gran durabilidad y resistencia.